A veces me cansa querer, regalar besos y obsequiar caricias, a veces me cansa... sentir.
A veces me cansa sonreír, rob(d)ar abrazos y observar rincones, a veces me cansa... la piel.
A veces me cansa (re)leer, bailar palabras y escribir medallas, a veces me cansa... la voz.
A veces me cansa el gemido, rojos robados y coitos presentes, a veces me cansa... el orgasmo.
A veces me cansa la c(g)ordura, la luz en pupilas opacas y bocas desiertas, a veces me cansa... el sueño.
A veces me cansa el tiempo, el vacío de recuerdos y minutos sesenteros, a veces me cansa... el deseo.
Solo a veces, muy pocas, me cansa la vida, y cuando ocurre, me siento... respiro y... ¡LA MUERDO!.